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Economía del Reino Unido sale de la recesión ante presiones de precios crecientes, revelan datos PMI

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La economía británica está mostrando signos de recuperación de su reciente recesión. El sector de los servicios está creciendo más rápido que antes y la confianza empresarial está en su punto más alto en dos años. Sin embargo, algunas desafíos acompañan la recuperación, con la inflación luchando de vuelta, esto es como si el Banco de Inglaterra posiblemente se desacelere en los recortes de las tasas de interés.

Según un informe del índice preliminar de febrero del Índice compuesto de gerentes de compras (PMI) global S&P/CIPS del Reino Unido, el número alcanzó 53.3, el más alto en nueve meses, desde el 52.9 de enero. Este crecimiento supera las expectativas de los economistas con creces, lo que sugiere que la recesión superficial que experimentamos el año pasado ha terminado. El sector de los servicios, por otro lado, ha mantenido su fuerza con el PMI permaneciendo relativamente sin cambios en 54.3. La manufactura crece, aunque más lento que el umbral, lo que implica una mejora en la economía en su conjunto.

El Banco de Inglaterra tiene algunas preocupaciones que abordar, entre las cuales están el crecimiento salarial en los servicios y los problemas de suministro debido a problemas en el Mar Rojo. Estos factores subyacen al mayor aumento del precio empresarial desde julio, otra evidencia de que las presiones inflacionarias permanecen.

El crecimiento económico del Reino Unido de un estimado de 0.2 pct a 0.3 pct pronosticado para el primer trimestre de 2024 ha tenido un impacto positivo a pesar de la presión política. Sin embargo, el banco central sigue dudando de la sabiduría de los recortes de tasas debido al riesgo de que la inflación se mantenga en un 4 por ciento, que es mayor que el objetivo del 2 por ciento.

El Reino Unido, en un movimiento para reposicionar su economía en medio de la recuperación económica, desplaza su atención a la inflación sin asfixiar el crecimiento. El aumento de nuevos negocios desde el pasado mes de mayo, el más alto en un año, muestra la fuerza subyacente de la economía. Además, las corporaciones se muestran reticentes especialmente en el ámbito de la contratación, mientras continúan las tensiones salariales. La economía de la UE se está desempeñando bien ya que se basa en la recuperación empresarial, la concentración de optimismo en el sector de servicios y el aumento del gasto. A pesar de esto, el Banco de Inglaterra enfrenta el problema de la variabilidad del voltaje porque necesita decidir el calendario y la magnitud de los cambios en las tasas de interés. Los próximos meses serán clave para determinar si hay un equilibrio entre reavivar el crecimiento de la economía y mantener la estabilidad de precios.

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