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La cotización de BONK ha estado bajando después de que los inversionistas retiraron su apoyo al activo. En los próximos días, la creciente presión de venta probablemente extenderá el escepticismo, enviando la criptomoneda meme a nuevos mínimos. Los inversores de BONK muestran una actitud bajista ante la situación. BONK parece sufrir por la falta de recuperación observada en las últimas 18 días, tras una caída del 40% en dos semanas.
Según los datos recientes del Chaikin Money Flow (CMF), BONK experimenta un aumento significativo en la salida de capital, intensificando considerablemente la presión de venta en el mercado. Este sentimiento bajista se refleja en el CMF, indicando una fuerte aversión al riesgo entre los inversionistas. Además, la tasa de financiación también se ha vuelto negativa esta semana, lo que es otro indicador bajista para el mercado. Esto sugiere que los traders están dispuestos a pagar una prima para mantener sus posiciones, lo que indica contratos cortos dominando el mercado.
Para los poseedores de BONK, una tasa de financiación negativa es especialmente reveladora, ya que indica un consenso entre los participantes del mercado de que es probable que el precio de BONK caiga. La fluctuación en las tasas de financiación refleja un sentimiento de pesimismo en el mercado más amplio, donde la expectativa predominante es que los precios de los activos actuales son insostenibles y probablemente caerán aún más. Con BONK cotizando a $0.00002122 y por debajo del soporte crucial de $0.00002153, el futuro se ve incierto para la criptomoneda meme. Si la caída continúa, el altcoin tendría una última oportunidad de rebotar desde $0.00001941, de lo contrario, las pérdidas podrían ser considerable al caer a $0.00001375.
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