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La administración de Biden ha desvelado su propuesta de presupuesto para el año 2025 el pasado 11 de marzo, marcando un hito importante en la historia de la regulación de los activos digitales en Estados Unidos. Este nuevo presupuesto, descrito en documentos oficiales, apunta a implementar una serie de medidas regulatorias específicas para los activos digitales, buscando de esta forma cerrar brechas que hasta ahora habían permitido a inversores de criptomonedas, especialmente a aquellos con grandes fortunas, beneficiarse desproporcionadamente. El foco de estas normativas es lograr un terreno de juego equitativo para todos los inversores, garantizando una mayor justicia fiscal y adaptando el código tributario del país a la era moderna de la inversión y la tecnología.
Entre las propuestas más destacadas se encuentra la aplicación de normas de venta de lavado a los activos digitales, el tratamiento de préstamos de valores como exentos de impuestos para incluir otras clases de activos, y la mejora de los requisitos de presentación de informes por parte de instituciones financieras y corredores de activos digitales. Estas medidas no solo se diseñan para actualizar el sistema fiscal a las características únicas y los desafíos de las transacciones de activos digitales, sino también para aumentar la transparencia y reducir las oportunidades de evasión fiscal. Significativamente, el gobierno también tiene planes de requerir que ciertos contribuyentes informen sobre cuentas de activos digitales en el extranjero, ampliando así el alcance de los esfuerzos de cumplimiento tributario de los EE.UU. a nivel internacional.
Desde el punto de vista financiero, se espera que las reglas de venta de lavado aplicadas a los activos digitales generen más de $1 mil millones en ingresos fiscales solo para el año fiscal 2025. Además, la inclusión de activos digitales en las reglas de marca al mercado, que requieren la tributación de los valores a su valor de mercado actual en lugar de a su precio de compra, podría generar $8 mil millones adicionales para el mismo año. A esto se suma la propuesta de un impuesto excise sobre las operaciones de minería de criptomonedas, reflejando el rápido crecimiento del sector y sus relativamente menores contribuciones fiscales, especialmente considerando su huella ambiental. Esta medida está proyectada para reducir el déficit nacional en aproximadamente $7 mil millones dentro del mismo marco temporal. Estas propuestas, junto con otras medidas incluidas en el presupuesto de Biden, apuntan hacia la reducción de costos para las familias, un fortalecimiento de la Seguridad Social y Medicare, y mayores impuestos para corporaciones y personas acaudaladas, proyectando reducir los déficits en $3 trillones durante una década, mientras se aumentan los ingresos fiscales en $4.9 trillones y se asignan aproximadamente $1.9 trillones a diversos programas.
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