La función de pago de Apple podría amenazar el futuro de los pagos con criptomonedas.

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Apple ha lanzado su última actualización de iOS 18 que introduce Tap to Cash, una forma sencilla de transferir dinero utilizando Apple Pay. Esta característica permite a los usuarios enviar dinero al instante simplemente acercando sus teléfonos entre sí. A medida que Tap to Cash gana popularidad, existe la posibilidad de que eclipse la utilidad de las criptomonedas para los pagos.

Aunque las criptomonedas han ido ganando aceptación a nivel mundial, con un 6.8% de la población mundial poseyendo criptomonedas, la adopción generalizada enfrenta importantes obstáculos. Uno de los más relevantes es la falta de regulación, lo que deja a los activos de criptomonedas vulnerables a riesgos de seguridad y volatilidad. A diferencia de las instituciones financieras tradicionales, que están reguladas y protegidas, las criptomonedas operan en un entorno descentralizado. Esta falta de supervisión puede disuadir a los comerciantes y consumidores.

A pesar de que el entorno regulatorio para las criptomonedas está mejorando, sigue siendo inconsistente. Países como Corea del Sur, Japón y Alemania han establecido marcos claros. Sin embargo, muchos otros, incluidos Estados Unidos e India, tienen pautas ambiguas. Esta falta de coherencia obstaculiza la confianza necesaria para una adopción más amplia. Además, la experiencia del usuario en los pagos con criptomonedas a menudo se percibe como engorrosa. La incomodidad de administrar múltiples billeteras contrasta notablemente con la simplicidad de usar tarjetas de débito o el Tap to Cash de Apple.

Tap to Cash de Apple aprovecha su ecosistema existente para ofrecer un método de pago sin fricciones y seguro. Esto podría atraer a usuarios que priorizan la conveniencia y la seguridad. Con el mayor soporte de Apple Pay para recompensas y entradas de eventos, la plataforma se vuelve aún más atractiva. Hasta que las criptomonedas puedan igualar la facilidad y seguridad de los métodos de pago tradicionales, podrían enfrentar dificultades para competir con innovaciones como el Tap to Cash de Apple.