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La supremacía de Shiba Inu como el rey de los memecoins parece estar enfrentando un difícil desafío. Esta semana, el precio de Dogecoin (DOGE) experimentó una caída tras divulgarse la noticia de que la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) emitió una Notificación de Wells a Robinhood, una popular plataforma de intercambio de criptomonedas. Dicha notificación, que precede a posibles acciones de cumplimiento, alega que Robinhood infringió múltiples leyes de valores. Esta situación ha generado un gran revuelo en la comunidad cripto, llevando a muchos inversores, especialmente aquellos que poseen grandes cantidades de DOGE (a menudo apodados “ballenas”), a retirar sus fondos de Robinhood.
El retiro más significativo involucró la impresionante cifra de 164 millones de DOGE, que en ese momento tenían un valor aproximado de $25 millones, siendo transferidos fuera de la plataforma. Esta masiva retirada por parte de un inversor ballena probablemente contribuyó a la incertidumbre del mercado que rodea a DOGE. A raíz de este escenario, el precio de DOGE se tambaleó, disminuyendo un 5.8% en las 24 horas posteriores a la noticia de Robinhood. Sin embargo, los analistas aconsejan no reaccionar precipitadamente. Aunque los problemas legales ciertamente proyectan una sombra sobre Robinhood, la salida de DOGE, incluida la transferencia de 164 millones, podría no ser el único culpable detrás de la caída del precio.
Adicionalmente, transferir criptomoneda de un intercambio a una cartera personal a menudo se ve como una movida alcista, indicando la intención de mantener a largo plazo. Otro factor que influye en el precio de DOGE es su estrecha correlación con Bitcoin (BTC). Ambas monedas operan bajo el mecanismo de consenso Proof of Work (PoW), que algunos consideran obsoleto en comparación con modelos nuevos y más eficientes en energía. La reciente desaceleración en el mercado cripto, especialmente en Bitcoin, probablemente también jugó un papel en la caída de DOGE.
A pesar del pesimismo a corto plazo, hay señales alentadoras para DOGE. Las órdenes de compra para DOGE actualmente superan a las órdenes de venta por un margen significativo, lo que sugiere un continuo interés de los inversores. Además, el Índice de Fuerza Relativa (RSI) de la memecoin se encuentra en un neutral 47, señalando que hay espacio para que nuevos compradores entren al mercado. Aun con la caída diaria, DOGE logró mantener un aumento de precio semanal, insinuando una resiliencia subyacente. Las próximas semanas serán cruciales para Dogecoin. El resultado de la batalla legal de Robinhood con la SEC y la capacidad de DOGE para recuperar el terreno perdido determinarán su trayectoria a corto plazo. Sin embargo, las previsiones a largo plazo para la memecoin permanecen cautelosamente optimistas.
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