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En los últimos tres años, el espacio de las criptomonedas ha experimentado transformaciones masivas. El año 2021 marcó un pico en la inversión en criptomonedas y blockchain por parte de empresas de capital de riesgo (VC), alcanzando los $33 mil millones, impulsado en gran medida por los paquetes de estímulo económico. Sin embargo, este auge fue seguido por una serie de bancarrotas en el ámbito cripto, desencadenadas por el ciclo de aumento de tasas de interés de la Reserva Federal de EE.UU., que comenzó con el colapso de Terra (LUNA) y culminó en el desplome del esquema Ponzi de FTX. La promesa de las finanzas descentralizadas (DeFi) perdió su brillo, especialmente con la pérdida de más de $3 mil millones en hacks de DeFi durante 2023. Esto contrasta con el actual rally de Bitcoin, que evidencia la falta de confianza en las altcoins, ya que la esperada “Temporada de Altcoins” aún no se ha materializado.
A pesar de los desafíos, existe un potencial renovado con la intersección de la inteligencia artificial (IA) y la tecnología blockchain. La composición de DeFi ha sido un terreno fértil para la innovación, aunque proyectos anteriores como Celsius Network y BlockFi, que buscaban hacer de DeFi un servicio más accesible, terminaron empañando la reputación de “cripto”. No obstante, la versión 2 de DeFi debería enfocarse en mejorar la experiencia del usuario y la seguridad, siendo la Ethereum Virtual Machine de conocimiento cero (zkEVM) una de las soluciones más prometedoras. zkEVM permitiría aumentar el rendimiento de la red y reducir los costos asociados, facilitando al mismo tiempo el pago de tarifas de gas con tokens alternativos. La aplicación de IA en este contexto podría ayudar a manejar los volúmenes de datos altos inherentes a estas aplicaciones, siendo la tokenización de obras de arte generadas por IA en NFTs un ejemplo de sus potenciales aplicaciones.
Por otro lado, la integración de IA ofrece una promesa de eficiencia al mejorar la coordinación del mercado y reducir errores humanos. En los mercados financieros, donde ya se utilizan algoritmos predictivos y automatización, la aplicación de IA en la composición blockchain podría extender esta eficiencia a una gama más amplia de operaciones financieras. Inversiones en IA ya han superado los picos de inversión en cripto de 2021, destacando proyectos innovadores en el cruce de IA y cripto, como Fetch.AI, que apunta a monetizar transacciones de red y servicios mediante el token FET. Estos desarrollos sugieren un camino hacia la democratización del acceso y la implementación de agentes de IA, con un mercado de agentes de IA proyectado para crecer significativamente en la próxima década.
En conclusión, la convergencia de IA y blockchain está forjando un futuro hiperfinanciero en el que nuevas formas de robo-advisors tokenizados pueden aprovechar al máximo la componibilidad de DeFi. A medida que los agentes de IA exploran nuevas posibilidades, emergen nuevos mercados, desde el análisis predictivo hasta la inyección de liquidez en mercados en cadena, preparando el escenario para una era de innovación financiera impulsada tanto por la inteligencia artificial como por la tecnología blockchain.
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